Cuando llegué a este colegio llamado CEIP Virgen de Tiscar era muy pequeñito. Empecé en parvulitos y lo único que hacía era llorar porque mi madre se iba. Cada vez me iba acostumbrando mas, ¡me divertía un montón!
Celebramos un montón de cosas, como el día de la paz, el día de la violencia de género y también hacíamos una carrera para recaudar dinero y dárselo a los niños pobres, y recogíamos ropa que nos estaba chica para dársela a esos niños.
Cada vez que pasábamos de curso aprendíamos más cosas como los números y las letras. Ahora estoy en sexto y he aprendido un montón de cosas. Ya mismo se acabará el colegio y mis compañeros y yo no volveremos a estar más aquí, pasaremos al instituto.
Me llevo al instituto un montón de amigos que he conocido, un cerebro lleno de cosas interesantes y sobretodo me llevo una gran tristezas de dejar unos maestros espectaculares como Manolo que me hizo mucho reír, con Paco que me enseño a leer y sobretodo con Loli, la mejor maestra que he tenido hasta ahora porque se no fuera por ella no aprendería tantas cosas.
Ahora voy al instituto y le enseñaré lo que aprendí.
