En Varsovia la capital de Polonia hicieron un gueto donde solo podrían estar los judíos. Irena Sendler era una joven enfermera de Polonia, a Irena Sendler se le partía el corazón al ver a niños morir de hambre. Irena
Sendler consiguió un pase para entrar al gueto y cada noche metía a
niños en ambulancia, en sacos de bolsas de patatas etc, e Irena
Sendler ponía los nombres de los niños en un bote y le cambiaba los
nombre para que las familias lo adoptaran, y el bote lo enterró debajo de un manzano cerca de su casa. Un hombre se dio cuenta de lo que hacia Irena
Sendler, y fue condenada a muerte, pero al final la
perdonaron. En 2007 fue presentada al premio Nobel y no lo ganó pero
pese a todo fue reconocida su labor, y en 2008 Irena Sendler murió el 12 de mayo.
Opinión: Lo bueno de este cuento es que gracias a Irena muchos niños pudieron sobrevivir mucha gente inocente
No hay comentarios:
Publicar un comentario